El contentamiento es la respuesta de un corazón que vive a plenitud con el Señor, que reconoce que nada merece, pero que todo lo recibe por gracia. ¿Cuál es tu aflicción? ¿Qué atormenta tu vida en este día? ¿Cuáles situaciones no te permiten disfrutar su gracia? Cualquiera que sea tu historia, Dios puede cambiar tu aflicción, el deseo de Dios es que cada uno de nosotros florezca y alcance su Máximo potencial desarrollando los dones y talentos que le fueron dados por El.