Deuteronomio 30:19
En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido perfeccionado en el amor.
Dos palabras que sobresalen en estos versículos: AMOR O TEMOR. Fuimos creados por un Dios de amor a su imagen y semejanza y nuestra salud encuentra su mayor expresión cuando funcionamos en amor. El miedo es contrario al amor y genera ambientes tóxicos y todo tipo de enfermedades físicas y emocionales.
Pensamientos sanos o tóxicos; según la dosis de amor o temor. Amor y temor no conviven en una misma casa. El perfecto amor echa fuera el temor. Todos en algún momento hemos experimentado estos dos polos opuestos y sabemos por experiencia los resultados de pensar y actuar en uno u otro.
Debemos elegir en cada momento; aprender a eliminar lo que nos lleva a la ansiedad, el afán, la amargura y empoderarnos y fortalecer lo que nos lleva a experimentar la paz de Dios y la fe. Es nuestra la decisión.
Así dice el Señor: Al cielo y a la tierra pongo hoy como testigos contra vosotros de que he puesto ante ti la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Escoge, pues, la vida para que vivas, tú y tu descendencia, Deuteronomio 30:19
Fanny González de Blanco
Hola buenas tardes, gracias por este mensaje, me ayuda a recordar que teniendo a Dios en el corazón no hay porque sentir miedos.
Muchas gracias por compartir Natalia, me alegra que el contenido te sirva de ayuda, para lo más importante que tenemos, nuestro Dios.
Gracias por este contenido tan enriquecedor.